Artículo 7 ¿Cómo aprender para enseñar? Técnicas de estudio y enseñanza

7.1 Introducción

“Cuéntame y lo olvidaré, enséñame y tal vez lo recuerde, involúcrame y voy aprender.” Benjamín Franklin.

El proceso de aprendizaje siempre es un camino extenso cuyo recorrido debe hacerse con cuidado para evitar irse por las ramas y perder de vista el tema objetivo. Implementar una técnica de estudio nos permite planificar una ruta con metas y un esquema bien definido de los subtemas directamente derivados de la idea principal de nuestro aprendizaje, de ésta manera podremos revisar si nuestro conocimiento cumple con lo que deseábamos desde un inicio e iremos marcando cada uno de los puntos que comprendamos de la ruta y encontrarnos en la capacidad de transmitir de la mejor manera lo aprendido.

Se presenta como opción un sistema de tres fases de aprendizaje para cada uno de los subtemas abstraídos, compuesto por aprendizaje teórico, aprendizaje técnico y publicación redactada del aprendizaje completo.

No debemos omitir que la actitud del estudiante es la que delimitará la eficiencia de los métodos planteados, una buena actitud acompañada de un buen método de aprendizaje nos permitirá alcanzar los objetivos planificados y prepararnos para poder transmitir el conocimiento.

7.2 Artículo

Con un sistema de tres fases podremos enfocarnos primero en conocer teóricamente el tema, buscamos conocer las definiciones con mayor reconocimiento, indagar en el tema para obtener un marco de referencia e identificar en qué casos podemos aplicar el conocimiento que estamos adquiriendo. Luego nos enfocaremos en la aplicación del conocimiento teórico a través de ejercicios técnicos, para solucionar problemas de los casos de aplicación que vimos en la primera fase y terminaremos realizando una redacción de lo que hemos aprendido, describiendo el por qué de las soluciones planteadas.

La prueba de fuego para saber si dominamos un tema es la capacidad que tenemos de transmitir el conocimiento que hemos adquirido, para ésto nos ayuda la tercera fase de la metodología planteada anteriormente, será mucho más sencillo transmitir el conocimiento si facilitamos la información en las fases en que lo hemos aprendido. Existen múltiples metodologías y a cada uno de nosotros nos puede favorecer una diferente, sin embargo, mayormente cada una se basa en éstos tres pilares; conocer, aplicar y enseñar.

Cono del aprendizaje. Fuente: http://bitly.ws/po5B

Figura 7.1: Cono del aprendizaje. Fuente: http://bitly.ws/po5B

En la figura uno podemos observar con mayor granularidad las primeras dos fases, planteadas con anterioridad, mediante el Cono del Aprendizaje de Edgar Dale. En el cono se indica qué tan eficiente será nuestro aprendizaje dependiendo del nivel de exposición con un tema mediante diferentes medios. Podemos observar que cuanto más una persona se involucra e interactúa con la información, más eficiente en porcentaje será su aprendizaje. Esto, por supuesto, considerando las diferentes formas en que un individuo puede captar la información y llegue a ser susceptible e influenciado por esta.

No debemos olvidar que cuanto mayor conocimiento y claridad tengamos sobre las distintas técnicas de estudio existentes, con mayor facilidad podremos seleccionar la más adecuada a nuestra situación para así poder adaptarla y personalizarla. Aprender a estudiar sacándole partido a las capacidades personales es muy parecido a un entrenamiento físico: hace falta voluntad, un buen entrenador y constancia. Si no conocemos la manera de hacerlo no llegaremos a tener buenos resultados. Hay que querer, pero también saber.

En resumen, se puede contar con las mejores técnicas de estudios, pero el rendimiento académico se ve afectado por innumerables factores, por ejemplo, de un estudiante a otro puede variar aunque se esté utilizando la misma metodología. Se ha generalizado la idea de que los buenos hábitos de estudio influyen considerablemente en los resultados del aprendizaje, pero no hay que confundir los hábitos de estudio con las técnicas de estudio. Ambos coadyuvan a la eficiencia en el aprendizaje y son necesarios si lo que se quiere es progresar y así poder sacar el máximo provecho al aprendizaje.

7.3 Conclusiones

  • Aprender es parte intrínseca de nuestra vida y necesitamos encontrar la mejor manera de hacerlo, llevar una planificación estructurada nos facilitará el proceso y nos beneficiará en la eficiencia del mismo. La actitud durante el aprendizaje es prioridad para obtener buenos resultados, si estamos interesados en aprender aplicaremos bien las técnicas de estudio para sacar el mejor provecho.

  • Debemos conocernos para identificar las prácticas que mejor se adecuen a nuestra forma de aprender y así tener claro cómo personalizar las técnicas de estudio que deseamos aplicar. Al tener una planificación estructurada podremos también generar material que nos servirá para enseñar a otros y transmitir eficientemente el conocimiento adquirido.

Referencias

  • [1] [Gómez, Montserrat.][Técnicas de estudio y estrategias de aprendizaje]. Recuperado de: http://bitly.ws/po5v. [Último acceso: marzo 2022].

  • [2] [Martínez Otero, Valentín y Torres, Liliana][Análisis de los hábitos de estudio en una muestra de alumnos universitarios. Revista Iberoamericana de educación]. Recuperado de: http://bitly.ws/po5x. [Último acceso: marzo 2022].

  • [3] [Dale, Juan][El cono de Edgar Dale ¿dejamos de leer?]. Recuperado de: http://bitly.ws/po5B. [Último acceso: marzo 2022].